CONFORT DOMÉSTICO

El método tradicional de calentar las casas es el fuego de la cocina, que es el que da nombre a la casa: el hogar. Primero con la cocina baja y posteriormente con la cocina económica o chapa, que además genera agua caliente, y que es ya de origen industrial. También se utiliza la chimeneta en la que se quema leña, y que suele estar en la sala. Las casas grandes tienen más de una.

También son muy utilizadas las estufas de hierro en combinación con todo lo anterior. Y otro invento más modesto: el brasero. El brasero es un recipiente metálico que se llena de brasas y se sitúa debajo de una mesa circular con faldas: la mesa camilla. Se construyen en cobre, bronce o chapa de hierro los más modestos. Los habitantes de la casa se sientan alrededor de la mesa y se calientan las piernas y parte del cuerpo aunque la espalda no hay manera de templarla….

En invierno pese a todos estos inventos, las casas son frías, y a la hora de acostarse, las camas están heladas. Se van implantando con los años distintos tipos de calientacamas de diseño industrial, más evolucionados que aquel ladrillo macizo que se calentaba en el horno y se metía entre sábanas.

En las casas más pudientes existe calefacción central a base de caldera de carbón con radiadores de agua. Esto requiere personal que se ocupe del funcionamiento de la instalación.

Más económico es el radiador de gas ciudad, que sólo puede instalarse en las ciudades donde haya fábrica de gas. En algunas de estas casas, todavía antes de la distribución de la electricidad, el alumbrado es así mismo de gas. Salta a la vista que quemar gas en las estancias, alumbra y calienta pero enrarece el ambiente.

Llega la electricidad. Surgen estufas eléctricas de todo tipo a base de calentar resistencias o por radiación de rayos infrarrojos.

Y para combatir el exceso de calor en verano aparte de bebidas frescas no hay más invento que un buen ventilador…

sortze data: 27-07-2022 / eguneratze data: 27-07-2022