Así se le llamaba a esta herramienta del hogar que se utilizaba para dar cera en los suelos. Consta de un palo redondo que se aplana en uno de sus extremos. En esta zona está el mecanismo de sujeción del trozo de cera que no es otra cosa que otra pieza plana que hace pinza junto con el palo. Esta pieza está sujeta al palo con una bisagra. El trozo de cera queda sujeto entre ambas piezas que se aprietan con un tornillo con mariposa.

Hace años, en vez de aplicar barniz en las tarimas de madera como se hace hoy en día, se solía dar cera. Para ello primeramente se frotaba el suelo con un cepillo de alambre para arrancar la cera vieja. Luego se fregaba con agua y lejía. Una vez seco se aplicaba cera con este palo, y por fin se pasaba una bayeta para dar brillo. Toda una tarea….

Dimensiones: 6 x 4 x 24 cm cm

Marca: No tiene marca

Año de fabricación: 1940 ±